Cuaresma, tiempo de conversión

Palabras del Santo Padre cuando le preguntan si esta cansado. Es una respuesta de fe la que nos transmite el Vicario de Cristo en la tierra. Claro que esta cansado, claro que se levanta todos los días igual que cualquiera y claro que se acuesta igual que cualquiera: agotado. Pero es sorprendente su respuesta por el hecho de que no deja de afirmar que sí que esta fatigado, pero va más allá, donde solo mediante la gran fe que tiene se puede llegar. Entiende perfectamente para qué estamos aquí, estamos de paso. 

Este mundo no es nuestro destino, nuestra meta es la gloria y el descanso eterno. Estas dos cosas ya las intentamos lograr ahora, normal, es humano. Pero que no se nos olvide que este mundo es "un valle de lágrimas" y que "polvo eres, y en polvo te convertirás". Vive la Cuaresma como un tiempo de conversión, reflexión y perdón, sobre todo de perdón.

Escucha de la Palabra, Gracia, Penitencia, Oración, Ayuno, Limosna, Caridad, Abstinencia, Apostolado.




Hay muchas más... pero estás son muy importantes. Bueno, podemos pasar de ello, podemos hacer como si no fuera con nosotros, como si fuera algo destinado sólo para santitos y no para el resto. No, yo voy a misa el Domingo, si eso comulgo, si eso me confieso... al cura que le escuchen las abuelillas en la homilía. Yo no tengo ningún interés, que acabe ya la misa, con sus cantitos, y lecturas aburridas de las que por su puesto no conozco ni la mitad de los nombres que aparecen.

Eso sí, yo soy cristiano, pero no practicante, estoy bautizado y bueno, si creo que hay un Dios... pero como a mi no me dice eso nada, no me llama la atención, pues... que va, yo prefiero pasarlo bien con mis amigos y no molestarme en plantearme mi relación con mi Padre, porque es tu Padre. Pero es que lo más preocupante es que esto también lo hacemos con nuestro padres, hermanos, abuelos, tíos, primos... voy a mi bola, paso de todo lo que no me interesa... Pues nada, tu sigue así, eh, que ya verás como ese vacío que tienes en tu interior jamás será saciado. Porque estamos llamados a la santidad, porque estamos hecho para buscar la verdad. No estamos aquí para pasar el rato. Asúmelo... porque no sabemos ni el día ni la hora.